viernes, 25 de julio de 2008

Vacios circundantes

Estoy falto de palabras,
tengo miedo de no poder
decir lo que quiero
cuando suspires.

Los obtusos ángulos
de mis divididas intenciones
se expresa fielmente
en este crónico
temblor de manos.

Me falta valor
para resistir
los embates de las dudas
enraizadas en mis ojos
de indeciso suplicio.

Incluso tengo deseos
de que ya no importe
lo que pase después
de la lluvia.

lunes, 14 de julio de 2008

Uno mas...

La misma realidad,
el mismo infortunio de querer
lo que me es vedado
por las lógicas comunes.

Nada de lo que tengo
me pertenece,
sigo como al principio,
sin nada mas que la sonoridad
de este silencio impío.

Otros merecen lo que deseo,
y lo obtienen.

Olvidar, seguir olvidando,
como una ánfora sin tiempo
que la llene,
dejando fuera todo
lo que no es vació.

sábado, 12 de julio de 2008

La lluvia sobre la piel

Pequeñas condenas que me atan
a la irremediable lejanía
de mis noches suturadas
y mis labios olvidados.

Someterse a las deidades
es solo una mas de las luces
que deseo apagar.

Un corazón perdonado
que late débilmente
sobre el frió concreto de la acera
transitada de la nada.

Vacíos y cimientos viejos,
catedrales impuestas
con las manos desnudas
que caen sobre mi devoción.

Las lágrimas del cielo
me recuerdan seguir vivo.

Mientras todo se quede
mas allá de mi alcance
se mantendrá también
la infinita resignación
de la inmaculada soledad.

jueves, 10 de julio de 2008

Fantasmas en la alcoba

Un gélido viento azota
mis desesperados intentos
por caminar entre sueños utópicos
de romerías infinitas.

Veo un rostro familiar
en el espejo de sal
del tiempo en suplicio,
los remordimientos me persiguen

Mi recuerdo es la vida
que no pude tener.

Las ilusiones del ayer
enredadas en las de hoy
se retuercen para alimentar
mis armazón de indefinidas
dudas desnudas
y fantasmas divinos.

Jamas estaré solo
si me acompaña este recuerdo.

miércoles, 9 de julio de 2008

Esas ficciones

Mienten los vientos
que me tren noticias
de perdones y expectativas,
me esconden su dolor.

La sinfónica irreverencia
me dice la verdad
disfrazada de sonrisa
y vacíos casi irremediables.

¿Te duelen los ojos?
Es imposible mentir
ante la reacción intempestuosa
de tu pasiva agresividad
y tus firmes convicciones.

Cuando se siente el temor
de perder un refugio,
de piel y sonrisas,
se retuercen las inseguras
calamidades que imaginamos.

¿Alguna vez
has simulado olvidar
todas las palabras?

martes, 8 de julio de 2008

Sin mucho que decir

Los amantes desquiciados
de la sinfónica individualidad
se atienen a las consecuencias
de las ciudades vacías.

Todo o nada,
como siempre he dicho,
y las elecciones
que debemos tomar
se separan.

Cada quien busca
lo que cree que necesita
para la verdadera soledad
de la autosatisfaccion.

domingo, 6 de julio de 2008

Pequeño Laberinto personal

Quiero poder diferenciar
las míticas catedrales
de la gloria
de las sonrisas complacientes
de mis fantasía.

¿Donde estoy?
La infinita gracia de vivir
atrapado en mi laberinto
de raras complicaciones
de vino tinto y madrugada
me contempla desde lejos.

Siento la necesidad de gritar
el nombre que me acongoja
sin saber siquiera cual es.

Y si todo resulta ser una ilusión
de recuerdos indelebles
y comparaciones eternas,
me quedare sentado
esperando a que vuelvan